No siento.
No muestro.
Ayer
es igual que hoy.
Hoy
igual que ayer.
Y mañana
no lo sé.
Mírame.
¿Qué es lo que ves?
Nada;
responde el silencio.
Estoy vacío.
Estoy roto.
Intento llorar
pero no lo consigo.
Se queda ahí,
en la garganta
en el pecho.
No me deja respirar.
Me ahogo.
Y poco a poco
muero.
Adiós
me digo.
Adiós
me responde el silencio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario